En un esfuerzo por frenar el robo de agua en el norte del estado de Sinaloa, los módulos de riego están proponiendo un aumento significativo en las multas por esta infracción, elevándolas a 50,000 pesos.
Esta medida busca proteger el agua de los canales que alimentan las plantas potabilizadoras, asegurando que este recurso esencial destinado al consumo humano no sea saqueado.
Juan Fernando Montoya Chinchillas, presidente de la Red Mayor del Valle del Fuerte, destacó la importancia de esta iniciativa.
“Incrementar la multa por robo de agua a 50 mil pesos es una medida necesaria para garantizar el respeto y la disponibilidad del agua en nuestros canales», explicó Montoya Chinchillas.
Este enfoque no solo pretende disuadir a los infractores, sino también garantizar que los ciudadanos tengan acceso constante al agua potable.
A pesar de que hasta la fecha no se han presentado denuncias formales relacionadas con el robo de agua, las autoridades no están tomando el asunto a la ligera.
La Guardia Nacional y la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) ya están colaborando para asegurar que las directrices sobre el uso del agua se cumplan rigurosamente.
Esta propuesta surge en un momento crítico, dado que el agua es un recurso cada vez más escaso y esencial para la vida diaria. Con el incremento de la multa, los módulos de riego esperan establecer un precedente que desaliente cualquier intento futuro de comprometer el suministro de agua a la población.
