Culiacán, Sinaloa.
· El encargado de la dirección general de MPS, Ángel Leyva, alertó que la decisión de suspender las clases durante el inicio del ciclo escolar afectaría a casi 900 escuelas y 170 mil alumnos en el estado.
Para Mexicanos Primero Sinaloa es inaceptable que se afecte el derecho de niñas, niños y jóvenes a recibir una educación de calidad, por lo que se debe garantizar el servicio educativo ininterrumpido, además de que reprueba que se use este derecho como rehén de disputas entre el sindicato y la autoridad educativa estatal.
Lo anterior lo señaló el encargado de la dirección general de Mexicanos Primero Sinaloa, Ángel Leyva Murguía, tras la convocatoria de los dirigentes del SNTE 53 para suspender labores en los cerca de 900 planteles escolares de educación obligatoria que existen en la entidad.
Leyva Murguía hizo un llamado a la autoridad educativa estatal y a los dirigentes sindicales para privilegiar el diálogo y con ello no afectar la educación de que imparten las maestras y maestros a las más de 170 mil niñas, niños y jóvenes.
“Exhortamos a los líderes de la sección 53 para que den marcha atrás en su intención de llevar a cabo un paro de labores que afectará alrededor de 900 escuelas y 170 mil alumnos en todo el estado. Debemos tener claro que la Suprema Corte de Justicia de la Nación ya ha establecido que el derecho de los niños a recibir una educación de calidad está por encima de cualquier otro interés”, enfatizó.
El encargado de la Dirección General de MPS detalló que el daño de un paro de labores para la educación en Sinaloa es múltiple, ya que se dificulta la profundización de la transformación educativa; se debilita el Estado de Derecho y se incrementa la posibilidad de que la autoridad y el sindicato negocien lejos del escrutinio público.
Ángel Leyva dijo que los niños de Sinaloa tienen derecho a contar con ciclos escolares completos, por eso “estamos viviendo un momento crucial para ser capaces de consolidar un sistema educativo que sirva a niñas, niños y jóvenes, y que no se sirva de ellos”.
Abundó que la escuela no es del sindicato ni del gobierno, sino de todos: alumnos, familias, docentes y directivos. ¡El derecho a estar, aprender y participar en la escuela es primero!
