En una petición que ha conmocionado a la nación, el alcalde de Monterrey, Luis Donaldo Colosio Riojas, ha solicitado al presidente Andrés Manuel López Obrador el indulto para Mario Aburto Martínez, el hombre que confesó haber arrebatado la vida de su propio padre, Luis Donaldo Colosio Murrieta.

Colosio Riojas, en una declaración con mucha de emoción y reflexión, apeló directamente a la compasión del presidente, instándolo a cerrar de manera concluyente el capítulo doloroso del magnicidio. 

Su aspiración es clara: propiciar la sanación tanto para su familia como para México en su conjunto.

“Apelando a la compasión del Presidente, yo diría que mejor indulte a Mario Aburto, que lo indulte, que ponga un carpetazo final a este asunto, que permita que tanto mi familia como México sanemos, que iniciemos un camino hacia la reconciliación a través del perdón”, expresó el hijo del malogrado candidato presidencial del PRI.

Sin embargo, el llamado de Colosio Riojas va más allá del perdón. Destaca la importancia de respetar la intervención de otra instancia judicial, argumentando que la justicia mexicana no cumplió adecuadamente en su momento. 

Busca dar un giro a la página oscura de la historia, confiando en que una nueva mirada pueda arrojar luz sobre la verdad.

El alcalde de Monterrey reconoció el recurrente resurgir del tema cada 3 o 6 años, especialmente durante los periodos electorales, calificándolo como un asunto manoseado que genera incomodidad. 

“Este asunto ha estado ya muy manoseado y yo creo que no es justo para la gente, todos, incluida la familia, que estén reciclando el tema con tal de sacar una raja política”, expresó Colosio Riojas.

Este llamado a la compasión y al cierre se produce en un momento crucial, ya que la Fiscalía General de la República (FGR) busca revivir el caso bajo la teoría del “complot”, persiguiendo al presunto “segundo tirador” de Colosio Murrieta. 

Un enfoque que Colosio considera innecesario y perjudicial, especialmente al anunciar su deseo de competir por un escaño en el Senado.

A casi tres décadas del magnicidio que dejó una huella imborrable en la historia mexicana, la solicitud de indulto de Colosio Riojas destaca como un capítulo crucial en la búsqueda de justicia, compasión y cierre definitivo para su familia y para un país que aún carga con el peso de aquel trágico suceso.